HOUSTON, Estados Unidos. Jun. 22, 2011.- Honduras tuvo su premio al llevar a México al alargue con un empate sin goles merecido y ahí se desmoronó como si tuviera su guión escrito hasta el minuto 90 y después, a la hora de la improvisación, de dar lo último para graduarse, se le escapara el aire.
Física y mentalmente más completos los verdes ya habían hecho un trabajo excesivo de desgaste y enseguida, a los 92', por fin completaron la obra, claro, como ha sido una constante en esta Copa Oro, con Aldo de Nigris como actor principal.
Barrera cobró un tiro de esquina y Aldo, siempre Aldo, anotó de cabeza. Ya no hubo noticias de los catrachos, pero sí de "Chicharito".
En otro corner, De Nigris, de nuevo, desvió un balón y Hernández mandó a las redes a los 98. El escenario se tranquilizó luego de una revuelta incompleta de los hondureños.
Y es que México extendió el duelo sin necesidad, pero también gracias a su escasa puntería y al juego físico del rival en los primeros 90 minutos.
El Tri hizo un duelo parejo, pero escaso de llegadas con oportunidad de gol en especial en la primera mitad. Controló el balón la mayor parte del tiempo y Andrés Guardado fue el hombre desequilibrante por la banda izquierda y el mejor del duelo mientras estuvo sobre el campo.
La fortaleza y el juego rudo de los catrachos, por sistema, consiguieron detener en diversas ocasiones los avances de los verdes y cortó el juego para llevarlo a donde querían.
Héctor Moreno, Javier Hernández y Andrés Guardado tuvieron las mejores aproximaciones por los mexicanos en la primera mitad.
El defensa a través de un remate de cabeza en un tiro de esquina, el delantero en una jugada de Guardado que no alcanzó a rematar bien plantado por la presión de un defensa. La aproximación de Andrés fue un tiro de media distancia que abrió en el último instante.
Por su parte, los hondureños se fueron haciendo de espacios a trompicones y consiguieron un tiro de Mejía y algo más.
No fue extraño que José Manuel de la Torre ingresara a Aldo de Nigris en la segunda mitad y buscó así definir el partido, pero los catrachos siguieron con su plan para extender el juego al límite.
"Chepo" enfrentó en la segunda mitad los 45 minutos más complejos de su era. Carlos Salcido y Andrés Guardado dejaron la cancha por lesión. Perdió el equipo mexicano profundidad por izquierda y Giovani y Pablo Barrera acompañamiento.
El Tri perdió forma y fondo, pero fue atacando con ráfagas de Giovani y Barrera, y siempre mantuvieron ocupados a Chávez, Thomas y compañía.
La mejor chance del lapso complementario fue obra de "Chicharito" cuando Barrera le puso en un tiro de castigo un bombón en la cabeza, pero éste le dio a destiempo y lo mandó a un costado.
Honduras se fue haciendo fuerte al paso de los minutos. No le interesó mucho atacar. Fue devorando minutos.
La paciencia del Tri pareció dar resultados a los 88 minutos cuando Giovani enfrentó a Valladares solo, pero cruzó de más su tiro.
Entonces el show de Talavera, tan reservado en toda la Copa Oro con tan poca participación. En dos minutos hizo una enorme atajada a un tiro de Espinoza y una descolgada sobre el tiempo en los momentos más apremiantes a la defensiva de toda la competencia.
Y cuando Honduras completó su plan, irse a tiempos extra, ya no supo que hacer. Se vio en el escenario planificado, pero sin fuerza y ante un equipo verde que se engrandeció.
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